Decoraciones y flores para el coche

Ha surgido de no se sabe donde pero triunfó y refleja necesidades instintivas de los conductores, asi lo entienden los psicólogos. La margarita pegada ha auto lleva ya más de un par de años y se la sigue usando como pegatina, es todo un éxito que no tiene explicación. Hasta Fernando Alonso se la puso a su Renault. La marca italiana Gurú extendió su uso.

Igual el fenómeno de esta pegatina era anterior. Se han vendido más de cien mil pegatinas y no se puede dar una explicación simple para un calibre semejante. La margarita pegada al coche ha pasado a ser clásico. Surgió como un símbolo de los hippies y por lo tanto como imagen significativa lleva 40 años, se asocia al Flower Power. Se transmitió por efecto dominó, viendo la pegatina en otro auto el conductor la deseó y asi, como otros fenómenos de contagio se expandió.



Se puede adquirir por valores de dos a 60 euros, un negocio de pequeños empresarios que elaboran serigrafías, aunque hay algunas grandes empresas que la han adoptado entre sus productos. Se clasifican por categorías, hay pegatinas tribales, banderas, animales, religiosas. Sus clientes, tienen edades que van de 18 a 35 años y suelen usarse en autos viejos, donde se suelen ver leyendas que despiertan sonrisas. Raramente un coche nuevo lleve pegatinas. Es que el automóvil resulta una extensión de la personalidad de su propietario conductor.

Según un estudio psicológico de la prestigiosa revista Nature publicado en Junio del 2008, realizado por la Universidad de Colorado, el uso de las pegatinas (calcos) está relacionado con un grado de agresividad al conducir. El adorno con pegatina expresa un carácter posesivo y territorial que puede derivar en conductas como bocinazos cuando otros conductores cometen errores. Los conductores muchas veces olvidan que están en territorio público y tienden a actuar como si estuvieran en terreno propio.

El estudio mencionado se basó en entrevistas a una variedad de conductores y reveló que el número de pegatinas era más importante que las leyendas o las imágenes y su significado. Se pudo probar que aquellos conductores con vehículo personalizado tenían 16% más de posibilidades de encolerizarse en la calle, en comparación a quienes no usan pegatinas.

Las pegatinas son estrategias para personalizar, marcar territorio, muy semejante a la conducta de los animales. También una manera de hacerse propaganda en la via pública. Una forma de atraer la mirada de los demás.

Quien se ocupa de personalizar su coche tiende a defenderlo más y por ello la tendencia instintiva a marcar territorio pegando calcos.

Todo está relacionado con el instinto de aupervivencia, proteger el propio territorio. Y vea usted adonde estamos llegando desde las simples e inocentes pegatinas. Nos recuerda que los seres humanos también somos parte del reino animal.

El adherir banderas y símbolos políticos sobre el coche hace gala de la nacionalidad, para quienes circulan con una matrícula foránea y buscan congraciarse para proteger su vehículo de posibles agresiones. Ahora con la matrícula de la Unión Europea han desaparecido las matrículas provinciales, entonces las banderas pasaron de moda, más se usan figuras de animales. Por ejemplo la bandera española fue sustituída por el toro de Osborne.

Los catalanes pasaron a pegar el burro catalán, en peligro de extinción, silueta creada e Bañolas (Girona) en el año 2004, para crear conciencia y proteger al animal, pero tomó un cariz político.

Desde Tolosa (Guipúzcoa) se difundió una pegatina de una oveja de raza latxa como símbolo de la tradición vazca. Los gallegos no se quedaron atrás y crearon su mascota, es una vaca sobre una banda azul.

Las frases célebres también se usan y las hay de todo tipo: risueñas, reflexivas, invitantes y hasta evangelizadoras.

Fuente de la información: elmundo.es Editado por Héctor H. Zorrilla para Tuning en España.